En el 90 aniversario de la proclamación de la 2ª República en Montijo

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Proclamación de la República en la Puerta del Sol de Madrid. Foto tomada de tumblr.com

El día 14 de abril de este año se conmemora el 90 aniversario de la declaración de la 2ª República en España, que supuso un soplo de aire fresco para la mayoría de españoles, quienes añoraban un cambio social, una modernización del país y el desarrollo de la igualdad y de la justicia social.
Pero los enemigos de ella, que en España son poderosos, han tergiversado y manipulado la historia de la República, con el relato de que fue un periodo de anarquía y desgobierno, para que las nuevas generaciones no vuelvan a reivindicarla. Y esto ocurre en un mundo donde la gran mayoría de los países viven bajo un régimen republicano, en paz y convivencia democrática.
Queremos aprovechar este 90 aniversario para recordar lo que supuso aquél 14 de abril de 1931 en Montijo.

Desde 1901 existía la poderosa Sociedad Obrera La Defensa, convertida en Casa del Pueblo, donde se integraban los trabajadores en el sindicato UGT y donde se reunían los partidos de izquierdas que existían en el pueblo (PSOE y Republicanos).
En Febrero de 1.926 se había formado en España la Alianza Republicana, presidida por Alejandro Lerroux, con el fin de ir preparando el cambio de régimen en el país ante el desprestigio del rey Alfonso XIII. En Montijo también se formaría más adelante esta agrupación integrada por el Partido Republicano Radical, el Partido Republicano Radical Socialista y Acción Republicana.
*El Partido R. Radical, cuyo líder nacional era Alejandro Lerroux, representaba el centro derecha y era votado e integrado por la clase media comercial e industrial además de algunos labradores. Su presidente era el médico Manuel Zúñiga y militaban en él Juan Antonio Codes Rodríguez, Agustín Arrobas Olmedo, Juan León Carretero, etc.

                                    Manuel Zúñiga. Caricatura de Rafael González Castell.
                                                     Juan Antonio Codes.

 Agustín Arrobas. Caricatura de Rafael González Castell.

*El Partido R. Radical Socialista, cuyo líder nacional era Marcelino Domingo, representaba el centro izquierda, era votado por la clase artesanal y comercial. Su presidente era el farmacéutico Santiago Cea Flores, se reunían en la Casa del Pueblo. Después se fusionaron en Izquierda Republicana.

                                   Santiago Cea Flores. Foto cedida por su nieto.

                       Andrés Acevedo Carretero, recaudador de arbitrios. Foto de su familia.

*El Partido Acción Republicana, cuy líder nacional era Manuel Azaña, representaba la izquierda pequeño-burguesa. Le votaban artesanos, dependientes de comercios, carteros y algunos obreros. Al final de la República era su representante el carpintero Mariano Aunión. Se reunían en la Casa del Pueblo.
La Alianza Republicana estaba presidida en Montijo por el joven propietario Pedro Maria Quintana.

                                                    Pedro María Quintana Gragera.

*Después estaba el PSOE que integraba a artesanos y obreros, era el más numeroso.
El 17 de agosto de 1930 firmarían todas las fuerzas republicanas y socialistas el llamado “Pacto de San Sebastian” para luchar por la República. Ante la imposibilidad de barajar la situación del país y presionado por la mayoría de los sectores sociales y políticos, el rey Alfonso XIII convocará elecciones municipales para el 12 de abril de 1.931 estando seguro de la victoria de las fuerzas que defendían la Monarquía. Inmediatamente se formaría, por los integrantes del Pacto de San Sebastián, una Conjunción Republicano-socialista para presentar candidaturas unitarias a las elecciones.
En Montijo se empezarían a reunir las direcciones de la Casa del Pueblo, de la Agrupación Socialista y de la Alianza Republicana, para constituir la candidatura de conjunción. Como la superioridad, en afiliados y en fuerza real, de la Federación Local de Sociedades Obreras era aplastante sobre los republicanos, hubo conflicto ya que éstos pretendían encabezar la candidatura a lo que no accedieron aquellos. Al final se llegaría al acuerdo de que irían tres candidatos republicanos en puestos de salida. Fue así como encararían las elecciones municipales en Montijo, teniendo como contrincantes a unos monárquicos de derechas -que estaban gobernando el Ayuntamiento desde siempre- desmoralizados y desunidos, y sin ningún proyecto que ofrecer a los ciudadanos progresistas.
En Montijo el éxito de la candidatura de conjunción republicano-socialista seria arrollador, saldrían elegidos 9 concejales de la Casa del Pueblo, 6 monárquicos y 3 republicanos.
Los monárquicos de derecha fueron encabezados por el propietario de La Nava de Santiago, y alcalde primorriverista de Montijo hasta el 14 de abril, Juan Gragera Quintana que dejarían pronto de asistir a los plenos tras su derrota.
Quien encabezaba la lista de la conjunción republicano-socialista era Juan Brugera Vega, aunque el que obtendría más votos sería Sebastián Gabardino, presidente de la Casa del Pueblo y maestro de escuelas particular.

                     Juan Brugera Vega. Foto tomada de la Fundación Pablo Iglesias.

                           Sebastián Gabardino Acevedo. Foto cedida por su hija.

El mismo día 14 de abril se proclamaría la República en Montijo. Al saberse la noticia de la victoria republicana se organizó una manifestación espontánea que salió de la Casa del Pueblo y se dirigió, recorriendo las calles, hacia la Plaza donde acudieron muchos vecinos y los dirigentes locales de izquierdas, se bajó la bandera monárquica y se izó en su lugar la tricolor que había llevado Juan Antonio Codes.
Nos lo contaría Andrés Acevedo Carretero en el periódico “La Voz Extremeña”, del que era corresponsal de Montijo, del día 19: “…se ha establecido el nuevo régimen en este pueblo, como en los demás de España, sin el menor incidente desagradable.
A los acordes de “La Marsellesa”, ejecutada por la banda de música de la localidad, fue izada la enseña de la República en la fachada del Palacio municipal, acogiéndosele por el numeroso público congregado en la plaza descubierto (quitándose los sombreros en señal de respeto) y con grandes vítores.
Hicieron uso de la palabra elementos de la Casa del Pueblo y del grupo republicano local, recomendando a todos orden, sin perjuicio de las naturales expansiones de júbilo.
El presidente del gremio de agricultores advirtió que la República no era Jauja sino orden, laboriosidad y triunfo y mando del pueblo por sus representantes legítimos.
La manifestación organizada partió del Centro Obrero recorriendo las principales calles, figurando en ella numeroso público y la banda de música.
Iba al frente la bandera tricolor seguida de todas las demás de los distintos gremios socialistas.
Durante la manifestación hubo cierre completo de establecimientos, reinando el más perfecto orden.”
Según me relató Alfonso Serrano Sánchez, testigo de aquél día, el 14 de abril de 1931 iba por la calle López de Ayala una gran manifestación de júbilo y alegría, gritando vivas a la República; delante llevaba la bandera tricolor Juan Sanz Cardoso, conocido como “el salao”, carpintero que después emigró a Madrid y murió en Montijo.
A quién le correspondió el honor de colocar, en el mástil del balcón del Ayuntamiento, la bandera tricolor fue al Presidente de Alianza Republicana Pedro Maria Quintana Gragera, que sería después el padre de la artista Elvira Quintana.

En lo alto de la fachada del Ayuntamiento se lee, en una placa oscura, Plaza de la República. Foto de Cecilio Rodríguez.

Seguía Andrés Acevedo en sus crónicas: “El jueves día 16 se posesionó en el Ayuntamiento la nueva Corporación, habiéndose nombrado alcalde-presidente a don Juan Brugera Vega, socialista; primer teniente, don Agustín Arrobas Olmedo, republicano; segundo teniente, don Sebastián Gabardino Acevedo, socialista; tercero, don Juan León Carretero, republicano; cuarto, don Miguel Merino Rodríguez, socialista; regidor síndico, don Francisco Romero Sánchez, socialista, y suplente, don Jerónimo Gómez, socialista”.

                                       Miguel Merino Rodríguez. Foto de su hija.

                                             Jerónimo Gómez. Foto de su hija.

El salón estaba abarrotado de público y en la plaza también había bastantes ciudadanos simpatizantes de la República.
A la hora de ver quién iba a ser el alcalde hubo un conflicto, pues Pedro María Quintana pretendía que se le eligiese a él ya que entendía que, en el pacto acordado entre la Casa del Pueblo, la Agrupación Socialista y Alianza Republicana, se había aceptado este punto. Pero los socialistas sólo admitían darle la 1ª Tenencia de Alcaldía pues consideraban que representaba a una fuerza política mucho menor. Pedro Maria no lo aceptó y por ello renunció a ser nombrado para ningún cargo, dimitiendo a los pocos meses de concejal.
Como vemos, saldrían elegidos concejales los principales dirigentes de la Casa del Pueblo; en este centro prefirieron nombrar como alcalde a Juan Brugera, presidente de la Agrupación Socialista, herrero, del sector moderado del PSOE, pues consideraban que en esos primeros momentos de consolidación de la República no debía llevar la alcaldía alguien del sector radical (como Sebastián Gabardino que era realmente el que lideraba la Casa del Pueblo). El alcalde fue elegido con 16 votos, 1 en blanco y 1 aisemcoa, de 18 que formaban el pleno.
Desde el día siguiente al de la constitución del nuevo Ayuntamiento democrático, la derecha monárquica comenzaría a hacerle el boicot y a propagar rumores (lo que hoy se llaman fake news); el primero de ellos fue que iban a despedir a los funcionarios no adeptos al nuevo régimen, lo que obligó al alcalde a tranquilizarlos. No cesaron ningún momento de desestabilizarla.

14 de abril de 2021.


Juan Carlos Molano Gragera
Juan Carlos Molano Gragerahttp://historiasdemontijo.com
Cuando estudié la carrera de Ciencias Políticas, en la Universidad Complutense, durante los años 1968/72, tuve algunos maestros como Antonio Elorza Domínguez o Juan Trías Vejarano que me enseñaron a investigar en los archivos para elaborar aspectos de nuestra historia. Aquella semilla se fue desarrollando desde finales de los años setenta cuando volví a vivir a Montijo y continúa viva hasta el día de hoy. Espero continuarla hasta que me fallen las fuerzas y la vista. Y me gustaría que se siguiese leyendo después de “pasar a mejor vida”.

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Cuando estudié la carrera de Ciencias Políticas, en la Universidad Complutense, durante los años 1968/72, tuve algunos maestros como Antonio Elorza Domínguez o Juan Trías Vejarano que me enseñaron a investigar en los archivos para elaborar aspectos de nuestra historia. Aquella semilla se fue desarrollando desde finales de los años setenta cuando volví a vivir a Montijo y continúa viva hasta el día de hoy. Espero continuarla hasta que me fallen las fuerzas y la vista. Y me gustaría que se siguiese leyendo después de “pasar a mejor vida”.

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